España pone en marcha el primer banco de ensayos de palas de pequeños aerogeneradores.
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El Centro de Investigaciones Energéticas,
Medioambientales y Tecnológicas, CIEMAT, es un organismo de referencia en el
mundo científico español, con una importante proyección en Europa y en los
países iberoamericanos.
Sus actuaciones en los campos de la energía y el medio ambiente sitúan al
Centro en el punto de interés no sólo de la comunidad científica sino también
de la sociedad y de su entorno geográfico. Por tanto, transmitir los logros de
sus desarrollos debe ser un objetivo prioritario.
Hoy en día la energía eólica representa una
opción de interés estratégico por la cantidad de demanda energética que
permitirá cubrir a largo plazo, gracias fundamentalmente a su amplia extensión
territorial y al hecho de que representa una opción medioambientalmente
sostenible. En este contexto, el desarrollo de las tecnologías de
transformación de la energía eólica se encuentra en la actualidad en plena fase
de expansión. Esta expansión se está haciendo asimismo efectiva en el campo de
la energía minieólica.
El desarrollo de miniaerogeneradores puede
acercar la energía eólica a los usuarios domésticos. De esta forma la
minieólica posibilita que sea integrada en nuevos entornos para la generación y autoconsumo de electricidad desde entornos urbanos, residenciales,
agrícolas/ganaderos, hasta polígonos industriales y gasolineras, en definitiva
al punto donde el consumidor necesita la energía.
Al
aplicar la tecnología de la minieólica nacen nuevas posibilidades que
facilitaría la popularización y uso de
este tipo de energía incluso en nuestros hogares, evidentemente el pensar que
sería suficiente con este tipo de tecnología sería un error ya que depende de
las condiciones meteorológicas, pero instalado miniaeorogeneradores en las
fachadas u azoteas de las casas, junto con otros sistemas de generación de
energías renovables, como la solar, podría reducir mucho la cantidad de emisiones
de gases contaminantes a la atmósfera. Además, la instalación de
miniaerogenerador en las azoteas o en los puntos donde está el consumo evitaría
"pérdidas en el transporte y distribución de la energía a lo largo de la
red eléctrica" dado que, con los sistemas que se utilizan en la
actualidad, se pierde "hasta un 15 por ciento de la energía".
Esto no es ciencia ficción y ya existe un proyecto
desarrollado por la empresa española Unceta en una comunidad de propietarios en
Lisboa. Esta instalación consta de ocho
miniaerogeneradores urbanos colocados sobre la cubierta de un edificio de
oficinas. La obra ha requerido una
inversión de más de 100.000 euros que ha aportado la comunidad de propietarios
del edificio sobre el que se asienta y que esperan recuperar en diez años.
La falta de una adecuada infraestructura de
carga constituye un gran desafío para la adopción de los vehículos eléctricos. Una solución combinada de energía solar
y minieólica podría ser la alternativa
para solucionar este problema. Como
ejemplo en una farola híbrida que utilizaría energía solar y minieólica,
permitiría a los usuarios de vehículos eléctricos cargar sus coches mediante
una fuente de energía renovable. Se trataría de una solución fácil de instalar
que puede acoplarse a la perfección en carreteras y aparcamientos.
Evidentemente antes de plantear un uso masivo
de esta nueva tecnología es necesario que existan bancos de prueba como el que se plantea en la noticia con el fin de solucionar los
nuevos problemas que pudieran surgir con el uso de esta tecnología como,
ruidos, vibraciones, velocidades excesivas de viento, fatiga de materiales,
etc.
César Iturriaga Manso.
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